Este
domingo en la noche, los Rolling Stones subirán al escenario después de
un paréntesis de cinco años, para celebrar el jubileo de oro de una de
las bandas más exitosas e imperecederas en la historia del
rock and roll.
Con entre 60 y 70 años en la actualidad, el cantante principal Mick
Jagger, los guitarristas Keith Richards y Ronnie Wood y el batería
Charlie Watts, darán cinco nuevos conciertos, dos en el O2 Arena de
Londres el 25 y 29 de noviembre y tres en Estados Unidos el próximo mes.
El domingo estarán con ellos en el O2 los antiguos componentes de la
banda Bill Wyman y Mick Taylor, la primera vez que los dos ex-Stones
actuarán con el grupo en más de 20 años.
Y en un nuevo anuncio el sábado, la cantante y compositora
estadounidense de R&B Mary J. Blige y el guitarrista Jeff Beck
también se han sumado a la lista de invitados especiales.
Los exuberantes veteranos autores de una serie de éxitos entre los
que se incluyen “(I Can’t Get No) Satisfaction”, “You Can’t Always Get
What You Want” y “Jumpin’ Jack Flash” han prometido un “impresionante”
concierto que durará más de dos horas.
Se espera un lleno completo de 20.000 personas, a pesar de las quejas
de los seguidores por el precio de las entradas que oscilaban entre las
95 libras (unos 117 euros) y las 950 libras por un asiento VIP.
Los precios fueron aún más altos en páginas secundarias de venta de
entradas, aunque el viernes eBay ofrecía varios asientos para el
espectáculo del domingo por debajo de su valor y todavía había plazas
oficialmente disponibles por alrededor de 400 libras.
La banda ha defendido los precios, diciendo que los conciertos son
caros de poner en escena, aunque Billboard, una publicación
especializada en música, informó de que el cuarteto recibiría 25
millones de dólares por los cuatro conciertos que se anunciaron primero.
El quinto fue añadido más tarde.
Explosión de actividad
Los conciertos son la culminación de unos meses llenos de
acontecimientos, ensayos y grabaciones para celebrar los 50 años desde
que los rockeros se subieran por primera vez a un escenario en el
Marquee Club de la calle Oxford en Londres en julio de 1962.
Se ha producido un álbum de fotos, dos nuevas canciones, un vídeo
musical, una película documental, un bombardeo de apariciones en los
medios y un puñado de conciertos de calentamiento en París.
El O2 Arena acogió la actuación de otra de las principales bandas de
la década de los 60 y 70, Led Zeppelin, en 2007, y aunque los Stones han
aparecido juntos de forma mucho más regular, es su primera actuación en
seis años.
Una de las causas del largo respiro ha sido la batalla de Wood contra
su adicción al alcohol, según la revista Rolling Stone, mientras que
Jagger y Richards también hicieron comentarios sobre el guitarrista en
su autobiografía de 2010.
“No nos podemos divorciar, ¡lo hacemos por nuestros hijos!”, bromeó
Richards en una entrevista reciente después de pedir disculpas a Jagger.
Aunque los excesos de rock and roll estén en el pasado de la banda y
sus mejores canciones vayan con ellos, los críticos de la música
alabaron su último sencillo “Doom and Gloom” incluido en su disco de
grandes éxitos “GRRR!” publicado recientemente.
Ya ha habido insinuaciones de que los cinco conciertos del grupo que
terminarán en el Newark Prudential Center el 15 de diciembre, podrían no
ser los últimos.
(Con información de REUTERS)(Tomado de Cubadebate)