Madrid,
18 oct (PL) Una multitudinaria manifestación puso fin hoy en esta
capital a tres días de huelga en los colegios públicos de España contra
los duros recortes presupuestarios aplicados en la educación por el
gobierno de Mariano Rajoy.
Miles de estudiantes y padres -unos 100 mil según el Sindicato de
Estudiantes (SE)- marcharon esta noche desde la céntrica plaza de
Neptuno hasta la sede del Ministerio de Educación, donde exigieron la
inmediata dimisión del titular de esa cartera, José Ignacio Wert.
Al término de la protesta pacífica, encabezada por una pancarta en la
cual se leía Por la educación pública, por el futuro de nuestros
jóvenes, el secretario general del SE, Tohil Delgado, afirmó que el
estudiantado no parará hasta lograr la renuncia de Wert.
Los
jóvenes queremos estudiar para mañana trabajar y debemos luchar para que
la educación no sea un privilegio de unos pocos como en la época del
franquismo, indicó Delgado en referencia a la dictadura del general
Francisco Franco.
Además de sacar a las calles a decenas de
miles de alumnos de secundaria y bachillerato, el paro -que hoy fue
secundado por el 80 por ciento del estudiantado- volvió a vaciar las
aulas en Madrid, Barcelona, Valencia, Oviedo, Pamplona y Alicante, entre
otras urbes.
Casi dos millones de colegiales estaban llamados a
secundar la medida de fuerza, convocada por el SE y respaldada por la
Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos
(Ceapa).
Sin embargo, a diferencia de las dos primeras jornadas,
la convocatoria a la huelga de este jueves fue hecha por la Ceapa, que
agrupa a unas 12 mil asociaciones de padres y madres de la instrucción
no universitaria en toda España.
Fue la primera vez que esta
organización, mayoritaria en la escuela pública, pidió a las familias
que no llevaran a sus hijos a los centros educativos, ante lo que
consideró un ataque sin precedentes al derecho a la educación en este
país europeo.
Tanto el gremio estudiantil como la Ceapa
denunciaron que la séptima reforma educativa de la democracia, a la que
califican de elitista, ahondará en las desigualdades sociales y
dificultará el acceso a la educación pública de calidad.
El
Gobierno del Partido Popular (PP) nos lleva hacia un modelo en el que
tienen derecho a una educación de calidad aquellas personas que se la
pueden pagar, y todos los demás nos quedaremos en un sistema
asistencial, advirtió Delgado.
El dirigente resumió en cuatro
las reivindicaciones de la protesta: la devolución de los cuatro mil
millones de euros recortados en la enseñanza, el regreso a sus puestos
de los 50 mil docentes despedidos, la retirada de la reforma educativa
del PP y la dimisión de Wert.
Las familias han entendido la
necesidad de dar un golpe sobre la mesa ante el desmantelamiento de la
enseñanza pública, el debate está en la calle y sólo por eso la huelga
ya es un éxito, destacó José Luis Pazos, portavoz de la Ceapa.
Aseguró que cada día resulta más difícil levantarse por la mañana, mirar
a la cara a nuestros hijos y explicarles por qué tienen que dejar de
estudiar, por qué no pueden comer de manera adecuada en el colegio o por
qué no tienen libros gratis. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario