Personalidades sirias destacan referendo constitucional

Escrito por Martin Hacthoun

Damasco, 27 feb (PL) Personalidades de la vida política en Siria destacaron la celebración del referendo para una nueva constitución en la que muchos en este país han puesto sus esperanzas. Endureció la Unión Europea las sanciones contra Siria Deponen armas varios grupos en ciudad siria de Homs El patriarca de la Iglesia Católica Griega de Antioquía y el Todo el Oriente, Gregorio III Lahham, expresó que la consulta responde a los preceptos del mundo árabe e islámico y occidental, y envía el mensaje de que "esta es Siria, su historia, su presente y su futuro". Mahmoud al-Abrash, presidente de la Asamblea Nacional, manifestó que las reformas y esta nueva carta magna, piedra angular de todo el proceso de cambios, en el que los propios sirios están construyendo el futuro de su país a través de la participación popular. Este domingo abrieron 14 mil 185 mesas de votación para 14 millones y medio de votantes en todo el país, incluidas 581 en la ciudad de Homs, donde en algunos de sus barrios, en especial Baba Amr, prosiguen enfrentamientos entre grupos armados que lo convirtieron en su bastión y las fuerzas del orden. El primer ministro Adel Safar expresó a la prensa que el proyecto constitucional satisface las aspiraciones del pueblo, al responder a sus necesidades en varios campos, particularmente los relacionados a la educación, la salud, garantías de la propiedad privada, libertades civiles y la independencia de la justicia. En su opinión es un importante paso en la historia de Siria y promoverá la pluralidad política y asegurará la democracia. Para el canciller Walid al-Moallen, la fecha del plebiscito resulta un "día histórico del pueblo sirio, que ha mostrado su firmeza y unidad, y por lo tanto merece una nueva Constitución para avanzar hacia un nuevo Estado de democracia y pluralidad política". A petición de la prensa que le solicitó un mensaje al extranjero, al-Moallen expresó: "preocupense por sus propios problemas internos y dejen a los sirios tranquilos" y agregó que "quienes cuidan por los intereses del pueblo sirio no le imponen sanciones". En una evaluación de la jornada del referendo, el ministro del Interior, Mohammad al-Shaar, dijo que el plebiscito se desarrolló con normalidad en las regiones de las 14 provincias. El mayor general hará público este lunes el resultado de la consulta que organizó y supervisó el viceministerio de Asuntos Civiles de su dependencia. La espaciosa Plaza Omeya se repletó de ciudadanos el domingo, donde acudieron en masa a manifestar su apoyo al referendo, a las reformas integrales que promueve el presidente Bashar al-Assad y a la unidad nacional. Mishleen, una estudiante que salía de la Universidad de Damasco para sumarse a la concentración en la cercana Plaza Omeya, dijo a Prensa Latina, que si bien la propuesta constitucional no es perfecta y la gente critica algunos de sus artículos resulta una iniciativa con nueva visión para Siria. A la joven, como otras que la acompañaban, les interesa en especial porque el anteproyecto garantiza los derechos y emancipación de la mujer en una sociedad igualitaria, en la cual podrán participar sin discriminación en su vida política, social y económica, algo realmente significativo en países del mundo árabe. Incluso, entre líderes de la oposición interna y de los nuevos partidos autorizados a funcionar, ya se habla de la próxima formación de un gobierno de unidad nacional con la participación de todos los sectores políticos e incluso de figuras independientes. Entre otros preceptos, establece las elecciones presidenciales, limita en dos el número de mandatos del Ejecutivo que en lo adelante serán de siete años, y el paso de un sistema de partido único -hasta ahora el Partido Árabe al-Baath- a uno multipartidista. Como en prácticamente todos los países occidentales, sigue siendo un código que le otorga al presidente poderes importantes como nominar al primer ministro y la potestad de rechazar anteproyectos de leyes. Al-Assad, quien lleva dos mandatos en el poder tras ser avalado en referendos populares en 2000 y 2007, con el 97 por ciento de los votos, empezaría de cero tras la puesta en vigor de la nueva Constitución, y en caso de ganar en los próximos dos comicios presidenciales, estaría al frente de Siria hasta el 2026.