8 de marzo de 2012

Siria acepta visión de China para solución de crisis interna





Escrito por Martin Hacthoun

Banderas de Siria y ChinaDamasco, 8 mar (PL) Siria aceptó lo que denominó la visión china para encontrar una solución a los problemas internos y expresó su disposición a aplicarla, pero consideró que todo arreglo depende también de la voluntad de las fuerzas externas que azuzan la crisis.
"En una crisis en la que están involucradas varias partes, todas deben cooperar y contribuir a resolverla; en el caso sirio no importa que el gobierno esté dispuesto a cumplir este o aquel plan, si las otras partes no se suman al proceso con igual voluntad", aclara el doctor en ciencias políticas Bassam Abu Abdullah.

Antes de partir de Damasco, el enviado especial de Beijing Li Huaxin, fue recibido por el canciller Walid al-Moallen quien agradeció la firme postura china de apoyo a Siria y le manifestó la disposición de Damasco a cooperar de forma positiva para llevar a cabo la propuesta de seis puntos.

En resumen, China propone el cese incondicional de la violencia de todo tipo desde cualquier fuente, facilitar los esfuerzos de la ONU en la esfera humanitaria, cooperar con el enviado de la organización mundial Kofi Annan, convocar a todas las partes para un diálogo nacional integral y acelerar el proceso de reformas en curso en Siria.

El plan llama también a todos los países a respetar la soberanía, independencia e integridad territorial del país árabe y recalca el rechazo de Beijing a una intervención armada y a todo intento de forzar un cambio de régimen en el país.

Li enfatizó el rechazo de China a los intentos de explotar la situación humanitaria para interferir en los asuntos internos sirios bajo cualquier pretexto.

En Siria -señala Abdullah- la oposición política que hoy puede organizarse en partidos y que reclama espacios está de acuerdo con emprender un diálogo nacional y participar en un gobierno de unidad nacional.

"Los sirios están cansados de toda esta violencia armada y terrorista y quieren la paz y tranquilidad pues ellos y el país ya han sufrido mucho", recalca.

Pero la pregunta clave es, acentúa el académico: "¿Aceptarán el plan chino los gobiernos que fomentaron y avivan la crisis y apuntalan a grupos de llamados opositores articulados en el exterior a conveniencia de las circunstancias?"

Y se responde: "No creo; han invertido demasiado y al acoger un proyecto así, estarían aceptando su derrota que, de hecho, ya la están sintiendo y la desesperación con que están actuando es evidencia de ello", opina.

La visita de Li coincidió con la de la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, quien también fue recibida por el canciller al-Moallen, quien le manifestó la disposición del gobierno a cooperar con la asistencia que pueda coordinar la organización internacional, pero siempre a partir del respeto a la soberanía e independencia de Siria.

Amos respondió que toda gestión se haría sobre una base de neutralidad e independencia.

Ahora el gobierno del presidente Bashar al-Assad también se apresta a recibir a Kofi Annan, recién designado como enviado especial de la ONU para Siria, quien se encuentra en El Cairo, Egipto, para reunirse primero con los representantes de la Liga Árabe antes de viajar, según se prevé, el viernes a Damasco.

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